viernes, 2 de mayo de 2008

Cosas de las que estoy hasta la polla (y me callo)

Pues eso, no sabía qué poner para darle vida al blog y se me ha ocurrido hacer una entrada en un tono cómico-reivindicativo para protestar libremente y porque me apetece de las mil y una cosas que me tienen hasta los huevos.

Estoy hasta los huevos de que me despierten cuando no me toca despertarme. Estoy hasta los cojones me tensen la cuerda y de dar tanta. Estoy hasta el cimbrel de ti, de ti, de ti y de aquel. Me toca las pelotas el modo en el que la gente valora las cosas, pero más aún el modo en el que no las valora.

Me tocan la moral los pluscuancansinos (que pueden llegar a ser) y los que desearían que fueras una máquina para meterte dinero y que funcionaras.

Se me queman los pelos de las orejas cuando abro la ventana y me doy cuenta del vendaval que hay afuera. Cuando llueven 4 gotas y todas me caen a mi o cuando me endiñan 3 diarios gratuitos en la misma calle porque he aceptado el primero.

Se me agrietan los párpados cuando veo a alguien que me quiere tomar el pelo y soY consciente, y él es consciente de que lo soy; y aun siendo conscientes ambos, intenta hacerlo.

Estoy hasta la polla de que se me levante ella sola sin avisar y se quede ahí parada durante meses.

Me irrita que la gente vea el típico cartel de "Empujar" o el de "Tirar" en las puertas y no le haga ni puto caso, y todavía se quede mirándote como diciendo: "¿cómo has cerrado la puerta si estás sentado?"

Detesto todas y cada una de las veces que hago el Login seguro en la página de la CAM para ver si he cobrado y me encuentro con el suculento saldo de 4'66€.

Odio cobrar al límite legal (día 5 del mes siguiente).

Pero todavía odio más que llegue ese día y no haya pillao un duro... qué mal, qué mal...

Tampoco me gusta tender la ropa, es un coñazo; cuerda para acá, cuerda para allá; pon la camiseta de este modo para que no se caiga al soltarla para coger una manga con la pinza; pero lo hago. Lo que ya no soporto es la extraña coincidencia que sucede siempre que pongo o tiendo una lavadora. El soleado cielo primaveral es rasgado por una capa de nubes que lo convierten en El nublado cielo primaveral, y siempre, siempre, pero siempre, se me moja la ropa. La semana pasada tuve las mismas camisetas 3 días tendidas u,u

(...)


Pero bueno, por lo menos estoy, que es lo que vale.